Juan 10:3-5 (NVI) "... las ovejas escuchan su voz. Llama a sus ovejas por su nombre y las saca. 4 Cuando ha sacado a todas las suyas, va delante de ellas, y sus ovejas le siguen porque conocen su voz. 5 Pero nunca seguirán a un extraño...". 

Obstáculos para escuchar la voz de Dios

Obstáculo 1 - Ocupación

Lucas 10:41-42 (NVI) "Marta, Marta -respondió el Señor-, te preocupas y te angustias por muchas cosas, 42 pero son pocas las que se necesitan; de hecho, sólo una. María ha escogido lo que es mejor, y no le será quitado".

 Obstáculo 2 - Pecado

Isaías 59:2 (NVI) Pero tus iniquidades te han apartado de tu Dios; tus pecados han ocultado de ti su rostro, para que no te escuche.

Salmo 66:18 (NLT) Si no hubiera confesado el pecado de mi corazón, el Señor no me habría escuchado.

Hechos 3:19 (NVI) Arrepentíos, pues, y convertíos a Dios, para que sean borrados vuestros pecados, para que vengan del Señor tiempos de refrigerio...

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Obstáculo 3 - Falta de perdón

Mateo 6:14-15 (NVI) "Porque si perdonáis a los demás cuando pecan contra vosotros, también vuestro Padre celestial os perdonará a vosotros. 15 Pero si ustedes no perdonan a los demás sus pecados, su Padre no se los perdonará a ustedes." 

Obstáculo 4 - Egoísmo

Santiago 4:3-4 (TPT) Y si pedís, no lo recibiréis, porque pedís con motivos corruptos, buscando sólo satisfacer vuestros propios deseos egoístas. Ustedes se han convertido en adúlteros espirituales que están teniendo un romance, una relación profana con el mundo. ¿No sabéis que coquetear con los valores del mundo os pone en desacuerdo con Dios?...

¿Cómo situarme para escuchar la voz de Dios?

1. Crear un espacio y un lugar para escuchar la voz de Dios

Salmo 46:10 (NVI) "Estad quietos y sabed que yo soy Dios"

Salmo 46:10 (NASB) "Cesa de luchar y conoce que yo soy Dios" 

 2. Honrar la Palabra de Dios

Salmo 119:105 (NVI) Lámpara es a mis pies tu palabra, luz en mi camino.

3. Ser fiel

Hebreos 12:11 (NVI) Ninguna disciplina parece agradable en el momento, sino dolorosa. Más tarde, sin embargo, produce una cosecha de justicia y paz para aquellos que han sido entrenados por ella.

Lucas 11:28 (NVI) "Bienaventurados más bien los que oyen la palabra de Dios y la obedecen".

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