Randy Bezet
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La preparación es poder
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15 de septiembre de 2024
Romanos 4:3 (NLT) "Abraham creyó a Dios, y Dios lo contó como justo a causa de su fe".
Prueba del hambre
Génesis 12:1-8 (NLT) El Señor le había dicho a Abram: "Deja tu tierra natal, tus parientes y la familia de tu padre, y vete a la tierra que yo te mostraré. Haré de ti una gran nación. Te bendeciré y te haré famoso, y serás una bendición para los demás. Bendeciré a los que te bendigan y maldeciré a los que te desprecien. Todas las familias de la tierra serán bendecidas a través de ti. "Así que Abram partió como el Señor le había ordenado, y Lot se fue con él. Abram tenía setenta y cinco años cuando salió de Harán.... y se dirigió a la tierra de Canaán. Cuando llegaron a Canaán, Abram recorrió la tierra hasta Siquem. Allí acampó junto al roble de Moreh. En aquel tiempo, la zona estaba habitada por cananeos.Entonces el Señor se apareció a Abram y le dijo: "Daré esta tierra a tu descendencia". Abram construyó allí un altar y lo dedicó al Señor, que se le había aparecido. Después de eso, Abram viajó hacia el sur y acampó en la región montañosa, con Betel al oeste y Hai al este. Allí construyó otro altar y lo dedicó al Señor, y adoró al Señor.
Salmo 46:1 (NVI) Dios es nuestro refugio y fortaleza, un auxilio siempre presente en la angustia.
Génesis 12:10 (NVI) Hubo hambre en la tierra, y Abram bajó a Egipto para vivir allí un tiempo, porque el hambre era grave.
Salmo 34:17-19 (NVI) El Señor escucha a su pueblo cuando le pide ayuda. Él los rescata de todos sus problemas. El Señor está cerca de los quebrantados de corazón; rescata a los que tienen el ánimo abatido. El justo se enfrenta a muchos problemas, pero el Señor viene al rescate cada vez.
Prueba de esterilidad
Génesis 16:1-4 (NLT) Sarai, la esposa de Abram, no había podido darle hijos. Pero tenía una sierva egipcia llamada Agar. Entonces Sarai le dijo a Abram: "El Señor me ha impedido tener hijos. Ve y acuéstate con mi sierva. Tal vez pueda tener hijos a través de ella". Y Abram aceptó la propuesta de Sarai. Así que Sarai, la esposa de Abram, tomó a Agar, la sierva egipcia, y se la dio a Abram como esposa. (Esto sucedió diez años después de que Abram se hubiera establecido en la tierra de Canaán.) Así que Abram tuvo relaciones sexuales con Agar, y ella quedó embarazada.
Hebreos 2:3 (NVI) Porque la [visión] espera un tiempo señalado; habla del fin y no resultará falsa. Aunque se demore, espérala; ciertamente vendrá
Romanos 10:17 (NVI) la fe viene de oír el mensaje, y el mensaje se oye a través de la palabra acerca de Cristo.
Juan 15:4-5 (NLT) "Permaneced en mí, y yo permaneceré en vosotros. Porque el sarmiento no puede dar fruto si se separa de la vid, y vosotros no podéis dar fruto si no permanecéis en mí. Sí, yo soy la vid; vosotros, los sarmientos. Los que permanezcan en mí, y yo en ellos, darán mucho fruto. Porque separados de mí nada podéis hacer".
Prueba de rendición
Génesis 22:1-5 (NLT) Algún tiempo después, Dios puso a prueba la fe de Abraham. "¡Abraham!" llamó Dios. "Sí", respondió él. "Aquí estoy". "Toma a tu hijo, tu único hijo -sí, Isaac, a quien tanto amas- y ve a la tierra de Moriah. Ve y sacrifícalo en holocausto en uno de los montes que te mostraré". A la mañana siguiente Abraham se levantó temprano. Ensilló su asno y llevó consigo a dos de sus criados y a su hijo Isaac. Luego cortó leña para hacer una hoguera para un holocausto y partió hacia el lugar del que Dios le había hablado. Al tercer día de viaje, Abraham levantó la vista y vio el lugar a lo lejos. "Quedaos aquí con el asno", dijo Abraham a los criados. "El muchacho y yo iremos un poco más lejos. Allí adoraremos y luego volveremos".
Hebreos 11:17-19 (NLT) Fue por fe que Abraham ofreció a Isaac como sacrificio cuando Dios lo estaba probando. Abraham, que había recibido las promesas de Dios, estaba dispuesto a sacrificar a su único hijo, Isaac, a pesar de que Dios le había dicho: "Isaac es el hijo por quien se contará tu descendencia." Abraham razonó que si Isaac moría, Dios era capaz de devolverlo a la vida de nuevo.
Hebreos 11:6 (NLT) Y es imposible agradar a Dios sin fe. Quien quiera acercarse a él debe creer que Dios existe y que recompensa a quienes lo buscan sinceramente.