SEMANA TRES; DÍA CINCO | JAMES CINCO

Lecturas de las Escrituras

NUEVA BIBLIA ESTÁNDAR AMERICANA

Mal uso de la riqueza

5 Venid ahora, ricos, llorad y aullad por vuestras miserias que se os vienen encima. 2 Vuestras riquezas se han podrido y vuestros vestidos se han apolillado. 3 Vuestro oro y vuestra plata se han corroído, y su corrosión servirá de testimonio contra vosotros y consumirá vuestra carne como el fuego. Es en los últimos días cuando habéis almacenado vuestro tesoro. 4 He aquí que la paga de los obreros que segaron tus campos, y que ha sido retenida por ti, clama contra ti; y el clamor de los que hicieron la siega ha llegado a oídos del Señor de los ejércitos. 5 Habéis vivido por placer en la tierra y habéis vivido lujosamente; habéis engordado vuestros corazones en un día de matanza. 6 Habéis condenado y dado muerte al justo; no os ofrece resistencia.

Exhortación

7 Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. El labrador espera el precioso producto de la tierra, siendo paciente al respecto, hasta que recibe las lluvias tempranas y tardías. 8 Tened también vosotros paciencia; fortaleced vuestros corazones, porque la venida del Señor está cerca. 9 No os quejéis, hermanos, unos contra otros, para que no seáis juzgados; he aquí que el Juez está a la puerta. 10 Como ejemplo, hermanos, de sufrimiento y paciencia, tomad a los profetas que hablaron en nombre del Señor. 11 Consideramos bienaventurados a los que soportaron. Habéis oído hablar de la resistencia de Job y habéis visto el resultado de los tratos del Señor: que el Señor está lleno de compasión y es misericordioso.

12 Pero sobre todo, hermanos míos, no juréis ni por el cielo ni por la tierra ni con ningún otro juramento; sino que vuestro sí sea sí, y vuestro no, no, para que no caigáis bajo juicio.

13 ¿Alguno de vosotros sufre? Que rece. ¿Hay alguien alegre? Que cante alabanzas. 14 ¿Está enfermo alguno de vosotros? Entonces debe llamar a los ancianos de la iglesia y ellos deben orar por él, ungiéndolo con aceite en el nombre del Señor; 15 y la oración de fe restaurará al que está enfermo, y el Señor lo resucitará, y si ha cometido pecados, le serán perdonados. 16 Confesaos, pues, vuestros pecados unos a otros, y orad unos por otros para que seáis sanados. La oración de un justo, cuando se realiza, puede lograr mucho. 17 Elías era un hombre con una naturaleza como la nuestra, y oró fervientemente para que no lloviera, y no llovió sobre la tierra durante tres años y seis meses. 18 Entonces oró de nuevo, y el cielo derramó lluvia y la tierra produjo su fruto.

19 Hermanos míos, si alguno de vosotros se desvía de la verdad y alguien le hace volver atrás, 20 que sepa que el que ha hecho volver al pecador del error de su camino salvará su alma de la muerte y cubrirá multitud de pecados.

ver The Chosen

Para profundizar en su estudio, hoy tenemos el episodio correspondiente de la serie de televisión The Chosen.

Lecturas de las Escrituras

Te animamos a que lleves un diario y utilices estas preguntas para estudiar el libro de Santiago.

  1. ¿Cómo me ayuda la traducción de esta semana a comprender mejor el corazón y el mensaje de Dios?
  2. ¿Qué verdad o mandato concreto me ha llamado la atención y cómo puedo ponerlo en práctica esta semana?
  3. ¿Cuál es tu oración para hoy basándote en lo que has leído? 

respondiendo a la Palabra

Oración

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